De Jardines Ajenos
De Dios
A. García Calvo
Eternidad es lo mismo que futuro, lo cual, algo más rastreramente considerado, quiere decir que la eternidad que Dios necesita, compatible con Su actualidad, no es otra cosa que el Futuro: "futuro", en efecto, quiere referirse a lo que, por un lado, no ha pasado y, por el otro, tiene que pasar; osea que, como dice la copla, «el porvenir nunca llega» (claro está, porque, si acaso llegara, ya no será porvenir), pero, por eso mismo, siempre está ahí, como porvenir; ese es el único Tiempo puro y, por tanto, el único que puede ser "tiempo-todo" o "eternidad"; lo que nos está pasando, es algo inasible, de lo que no puede hablarse ni saberse, y en cuanto a los hechos, habrán sido esto o habrán sido lo otro, serán acaso recuerdo vivo, o serán datos y fechas de la historia, de los cuales los testigos dirán de uno u otro modo, otro de otro, y los indagadores de las huellas las interpretarán cada cual según su teoría, pero la seguridad acerca de los hechos sólo llegará el día que todos los datos y testigos se reúnan y concuerden; y así el saber de los hechos queda también condenado a ser futuro.
De Dios, Lucina
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